Alicante responde a la crisis del Imserso: dos cruceros dejan 400.000 € en 10 horas a bares y tiendas
Los dos cruceros han reportado a la ciudad la visita de 5.500 cruceristas de los 220.000 que ha recibido este año
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Frente a la crisis del Imserso, que amenaza seriamente a más de 13.000 empleos directos en la Comunidad Valenciana, la ciudad de Alicante desarrolla desde su ayuntamiento una estrategia paralela para generar actividad económica en los sectores cuyo futuro depende del Turismo. Así, Alicante ha recibido este martes a más de 5.500 cruceristas. Una visita cuyo impacto económico en apenas 10 horas de estancia se eleva por encima de los 400.000 euros, en hostelería, comercio y excursiones, según han informado fuentes del Ayuntamiento de la capital de la Costa Blanca. Los cruceros han llegado a las 8 de la mañana y zarpan a las 18 horas.
Se da la circunstancia de que el Ayuntamiento de Alicante, que dirige el popular Luis Barcala, y el de Benidorm, cuyo alcalde es el también popular y presidente de la Diputación Provincial, Toni Pérez, fueron en su día los dos primeros en anunciar que en caso de que la tasa turística que quería imponer el Gobierno del socialista Ximo Puig fuera voluntaria ellos no la implantarían.
A día de hoy, Benidorm es la ciudad-turismo por excelencia en la Comunidad Valenciana, en tanto que Alicante ha recibido a más de 220.000 cruceristas en lo que llevamos de año fortalecida a través de la estrategia de quitar trabas al turismo, como la citada tasa turística. Una manera de garantizar que situaciones como la del Imserso no afecten al desarrollo económico de las pymes urbanas.
Las circunstancias que rodean la llegada de ambos cruceros este martes a Alicante son nuevas, porque en años anteriores resultaba muy poco frecuente que dos cruceros coincidieran el mismo día en Alicante.
Sin embargo, con el despegue del sector, que este año prevé superar todos los registros de cruceristas en la ciudad de Alicante, esta situación se producirá hasta en siete ocasiones distintas, lo que supone un empuje muy importante para el pequeño comercio local, pero también para la hostelería y el turismo cultural, de que la ciudad busca ser un referente.
Los dos cruceros que han producido este impacto económico en apenas diez horas son el Arvia, de P&O Cruise, y el Seaburn Pursuit, de Holland America, que han atracado en torno a las 8 de la mañana en el puerto de Alicante.
El primero de ellos, con 5.200 pasajeros a bordo, ya ha recalado otras veces en la ciudad. El segundo, en su primera escala en Alicante, transporta a 265 pasajeros. La mayoría de ellos, han visitado el Castillo de Santa Bárbara, una fortaleza del siglo IX ubicada en pleno centro urbano, que es el monumento histórico más visitado de toda la Comunidad Valenciana y que se está convirtiendo en un referente del turismo cultural.
Esta estrategia turística ha tenido en los últimos días un nuevo impulso. Alicante se ha integrado en la mayor asociación comercial de la industria de cruceros de todo el planeta, CLIA, de la que participan, además, más de 13.000 agencias de viaje y 50.000 agentes, según ha anunciado la concejala de Turismo, Ana Poquet.
La apuesta por el turismo de cruceros obedece, pues, a una estrategia conjunta de la que participan la Autoridad Portuaria de Alicante, el Ayuntamiento de la capital, el Patronato Provincial de Turismo Costa Blanca, la Generalitat a través de Turisme Comunitat Valenciana y la Asociación Alicante por el Turismo de Cruceros. Sólo en este año 2023, la ciudad de Alicante ha recibido a más de 220.000 cruceristas en 87 cruceros.